Master en ventanas

Aislamiento acústico

Las ventanas son uno de los elementos más importantes a la hora de aislar nuestra vivienda de los ruidos del exterior. O bien lo contrario, comercios o bares con la necesidad de que los ruidos ocasionados se queden dentro del establecimiento para no molestar a los vecinos y cumplir con la normativa vigente. Es por ello, que a la hora de elegir una ventana es importante fijarse en la reducción en dB, cuanto mayor sea este número más me va a aislar la ventana acústicamente.

Para potenciar el aislamiento acústico se recomiendan series de triple junta de estanqueidad y vidrios laminares acústicos (o bien intercalando espesores de los vidrios y cámaras).

Índice de reducción sonora (Rw)

Muestra el aislamieto acústico directo, en dB.

Protección antirrobo

Según las últimas estadísticas la mayor parte de los robos se producen por puertas y ventanas de fácil acceso.

En la seguridad antirrobo se miden 3 elementos:

  • Herramientas utilizadas para la intrusión (básicas, medias o avanzadas)
  • Tipo de ladrón (vándalo o experimentado)
  • Tiempo de entrada

Se diferencias 3 clases RC1, RC2 y RC3, siendo RC3 la más difícil para los ladrones.

El aislamiento antirrobo en una ventana se consigue con:

  • El herraje (cerraderos antirrobo y mayor número de puntos de cierre)
  • Vidrio laminar antirrobo
  • Persiana de seguridad autoblocante

Estanqueidad al agua

La estanquidad al agua de una carpintería cerrada se define como su capacidad para resistir a la penetración de agua.

La norma EN 12208 establece la clasificación de las ventanas y puertas ensayadas con la EN 1027. Se establecen hasta 9 clases con el método de Ensayo A y 7 clases con el método de Ensayo B. En la tabla se recogen todas estas clasificaciones.

Permeabilidad al aire

La permeabilidad al aire define la cantidad de aire que pasa (por causa de la presión) a través de una ventana o una puerta cerrada. Se mide en m3 /h.
Una ventana ensayada pertenece a una clase dada si la permeabilidad al aire medida no sobrepasa el límite superior a cualquier presión de ensayo en esa clase. La ventana queda clasificada con un grado que va desde Clase 0 (sin ensayar) a Clase 4 (la de menor permeabilidad, por tanto, la mejor en esta cuestión).

Resistencia al viento

La resistencia al viento de las ventanas se determina mediante ensayo con la norma EN 12211. Se somete a la ventana a tres pruebas de presión: una para ver la deformación (P1), una de presión repetida (positiva y negativa, P2) y otra de seguridad (P3). Con esto se determina la flecha frontal relativa y la resistencia al deterioro por las cargas de viento.

Se establecen cinco categorías según las presiones a las que se haya ensayado la ventana, desde Clase 0 hasta la Clase 5 (véase tabla 1), y otras tres categorías según la flecha máxima que admitamos (desde la A con 1/150 a la C con 1/300; véase tabla 2). La máxima clasificación será de C5, es decir, una ventana cuyos elementos presentan una flecha menor de 1/300 a presiones de 2000 Pa. La ventana ensayada tampoco debe mostrar ningún defecto ante las presiones P1 y P2, y debe permanecer cerrada bajo la presión P3, aunque en este último caso si se permiten desperfectos. La resistencia a la carga de viento es especialmente importante sobre todo en ventanas situadas a gran altura en fachadas expuestas, donde las presiones de viento son considerables. En estos casos debería exigirse al menos una clasificación C4.

Deplazamiento frontal: Desplazamiento de un punto de la muestra de ensayo medido perpendicularmente al plano de la muestra del ensayo.

Flecha frontal: Desplazamiento frontal máximo de un elemento del marco menos la semisuma de los desplazamientos frontales a cada extremo del elemento.

Flecha frontal relativa: La flecha frontal de un elemento del marco dividida por la longitud del elemento sobre el que se ha medido la flecha frontal, por ejemplo la distancia entre los extremos del elemento.

Certificado para casas pasivas

Nacido en Alemania hace más de dos décadas, el estándar Passivhaus es un concepto de construcción que busca obtener el máximo confort a través de una elevada eficiencia energética.

El estándar promueve la construcción de viviendas de alta eficiencia energética mediante un gran aislamiento térmico, un riguroso control de filtraciones, y una elevada calidad del aire interior. Además, en la medida de lo posible, se intenta reducir el consumo de energía mediante las ganancias solares en invierno y con procedimientos de refrigeración pasiva en verano. Todas estas medidas permiten reducir el consumo energético entre un 70% y un 90% (en comparación con construcciones convencionales y dependiendo de las particularidades del edificio de referencia). Finalmente, si los criterios definidos en el estándar se cumplen el edificio puede ser certificado como Passivhaus o casa pasiva.
Los componentes y sistemas empleados en un edificio de estas características también pueden certificarse por parte del mismo órgano que certifica las edificaciones. Si cumplen con los criterios del estándar y superan los controles realizados por el instituto podrán obtener el certificado de componente para casa pasiva. Este distintivo reconoce la validez del conjunto de soluciones empleadas en el edificio y asegura un alto grado de confort, calidad y eficiencia energética: cerramientos de muy altas prestaciones, una elevada hermeticidad, aislamientos térmicos reforzados, un exhaustivo control de los puentes térmicos, un sistema de ventilación con recuperación de calor. Son los pilares fundamentales de un edificio pasivo.
En el estándar de edificación Passivhaus, las ventanas se consideran como uno de los pilares fundamentales para la conservación de la energía. Su gran importancia se debe a que la ventana debe aportar: aislamiento, hermeticidad, seguridad, captación y protección solar, luz natural, etc. Todo ello en un único componente. Lo que hace de este elemento una pieza fundamental para alcanzar los criterios del estándar. Por ello, el Instituto Passivhaus – órgano responsable para la certificación de las viviendas Passivhaus y de sus materiales – exige un alto nivel de calidad y prestaciones a los cerramientos y a todos los elementos que los componen.
Nuestras ventanas Synego y Geneo tienen homologación Passivhaus.

Perfil

Transmitancia térmica

Es un valor que mide el aislamiento de una ventana. Cuanto más próximo a 0 mejor, ya que este valor significaría que la ventana no transmite, es decir, no hay pérdidas del interior y la ventana me aísla totalmente del exterior. En la compra de ventanas y puertas tenemos que buscar el valor más próximo a 0, con esto se consigue potenciar el ahorro y el confort dentro de la vivienda.

La letra U mayúscula es el símbolo utilizado en la construcción para la transmitancia térmica.

La definición más técnica es: “flujo de calor que pasa por unidad de superficie del elemento y por grado de diferencia de temperaturas entre dos ambientes separados por dicho elemento”. Por lo tanto, su unidad en el Sistema Métrico Decimal es W/(m²·K), Watt por metro cuadrado por Kelvin.

En las ventanas o puertas tenemos que diferenciar 4 valores U:

Uf: valor de transmitancia del perfil de aluminio o PVC.

Ug: valor de transmitancia del vidrio.

Usb: valor de transmitancia del cajón de la persiana.

Uw: valor de transmitancia de la ventana completa. El Uw se determina multiplicando el U de cada elemento por el área que ocupa en la ventana y dividiéndolo por área total.

Profundidad constructiva

El lo que mide el marco en mm, es decir, la distancia desde el punto exterior del marco de la ventana hasta el interior.

Número de cámaras

Son las particiones que tiene un perfil en su interior, su función es aislar. Cuantas más cámaras mayor aislamiento.

Juntas de estanqueidad

Son los elementos del perfil que le proporcionan la estanqueidad a la ventana. Las funciones de dichas juntas se extienden también a potenciar el aislamiento térmico y acústico. Además, en el caso de la triple junta, ayuda a proteger el herraje de la ventana, y por lo tanto prolongar su vida útil.

Rotura de puente térmico

La rotura de puente térmico se da únicamente en las ventanas de aluminio. El PVC con rotura de puente térmico no existe, ya que es un material aislante por naturaleza al igual que la madera, y por lo tanto, no conductor.

El aluminio es un conductor, y lo que se hace para que este material llegue a aislar es ponerle la rotura de puente térmico, es decir, que el perfil que está en el exterior no esté en contacto con el que da al interior de la vivienda, esta separación se hace con varillas de poliamida, aunque actualmente el aluminio está avanzando en la mejora del valor de transmitancia, y por ello, nuestra nueva ventana de aluminio incorpora resinas de poliuretano de baja densidad en la rotura en lugar de las varillas de poliamida.

VIDRIO

El vidrio es una parte esencial en la ventana al ser el que mayor área ocupa.

Existen multitud de variantes, es por ello que en Aluarte fabricamos la ventana según las necesidades de cada cliente siguiendo un orden.

Vidrio bajo emisivo

Es un vidrio que contiene una capa pegada no visible. Su función es potenciar el aislamiento con la máxima transmisión luminosa. Además aprovecha el calor del sol cuando incide directamente en la ventana.

En la imagen anterior podemos ver un doble acristalamiento con un bajo emisivo.
La mayor parte de nuestras ventanas se fabrican en triple acristalamiento con dos bajos emisivos y una luna normal.

Vidrio control solar

En ocasiones, dependiendo la orientación y la zona en la que esté el edificio, el calor producido por el sol cuando incide en la ventana es un problema.

Los vidrios con control solar también son vidrios de capa, al igual que los bajos emisivos, solo que con una composición difrente.
Su finalidad es reducir el calor aportado por el sol cuando incide en la ventana, además de aislar.

Existen diferentes tipos de control solar dependiendo de la severidad que cada cliente necesite.

La mayor parte de nuestras ventanas se fabrican en triple acristalamiento con un control solar, un bajo emisivo y una luna normal.

Gas argón

La función de este gas es potenciar el aislamiento del vidrio.

Se inyecta dentro de la cámara en el doble acristalamiento, o de ambas cámaras en caso del triple acristalamiento.

Vidrios laminares acústicos

Son dos lunas pegadas entre sí por un butiral acústico.
El butiral de polivinilo (PVB) es un material plástico.

Vidrios laminares antirrobo

Son dos lunas pegadas entre sí por 4 unidades de PVB, para incrementar aún más el grado de seguridad antirrobo se pueden meter 6 unidades de PVB, y si se quiere llegar al grado de seguridad antibala se consigue con 10 butirales.

El butiral de polivinilo (PVB) es un material plástico.

Intercalario cálido

En la mayor parte de los acristalamientos se puede observar que el perfil separador es de aluminio. Para mejorar el valor de transmitancia se sutituyen por los intercalarios cálidos.